Manipulados por el Tiempo

Que "el tiempo es oro", es algo que no se pone en duda, pero el sentido de esta afirmación debería entenderse diferente, puesto que correr constantemente y luchar contra el reloj, lo que provoca es que el tiempo se nos escape de las manos. La sociedad actual exige cada vez más preparación y más ocupación para enfrentar la competitividad de la auto-satisfacción que solo valora el tiempo por su rentabilidad, impregnándonos con el miedo constante de no ir al ritmo que se ha convertido en obsesión.

La invención del reloj seccionó nuestra relación con el tiempo y nos sometió a su manipulación. Hay horarios para cada cosa, no necesitamos realizar ninguna actividad porque nos apetezca, solo hay que mirar el reloj. Pensamos que estamos obligados a llevar un ritmo de vida apresurado y en medio de la prisa no podemos ver y vivir el mundo ni detenernos a pensar. Con la hiperactividad conseguimos estrés y enfermedad, la velocidad nos impide la creatividad y la paciencia y no nos deja tiempo para relacionarnos adecuadamente. Tener prisa es la prueba del éxito. En la vida cotidiana hemos dejado de lado lo importante para ocuparnos de lo urgente. ¿Hay forma de escapar de la manipulación del tiempo?